Sunday, April 20, 2008

Vision


No teníamos idea como habíamos llegado aquí
Ni el motivo de nuestra existencia
Ni el final del camino
Ni menos, que destino tenia aquel viaje,
Donde sentados, veíamos pasar raudo
Los años como paisajes en las ventanas
A toda velocidad.
Cuando con rostros infantiles aún
Veiamos pasar campos rosados
De flores blancas.
Y luego un campo caluroso
Lleno de frutos dulces.
Y luego tan pronto,
Un mundo doliente
Donde millones de pajaros muertos
Caían desde el cielo.
Cada uno de nosotros
Ibamos acompañados por dos hombres
Que apuntabanos nuestras cabezas
Con negras pistolas.
Un día aquel insensato
Que miró hacia tras por las ventanas
Fue fulminado por un disparo
Y aquel otro que miró hacia delante
Fue herido en las piernas
Muriendo en vida
Desangrandose silenciosamente
Frente a todos los demas
Dia tras día…
Hora tras hora
Puedo recordar tambien
El ruido que hacian las gentes
De los vagones vecinos,
Que parecían revolverse en fiestas
Aquellos vagones que un dia un acompañante
Me aseguro que llevaban por nombre:
Vida.
Cuanto espanto aun siento en el alma
Cuando recuerdo aquella vision
Que captaron mis ojos
Cuando en un instante de revuelo
Pude ver a traves de las ventanillas
Que aquellos vagones iban repletos
De personas bailando con los ojos vendados
Y los labios cosidos con gruesos hilos
Y los oidos tapados con grandes audifonos
Contorsionandose pavorosamente
Entre pantallas electricas y torrentes de imágenes
E información
Aquellos hombres como irracionales
Nutriendose a cada momento los oidos
Con algo que con solo una cosa pude relacionar.
Con la mentira.
Y sentí pena por esos seres.
Llenandose me alma de más desazón.
Algunos de nosotros
Solo mirabamos quietos
El devenir del paisaje alla afuera,
Con tal calma,
Que aquellos negros hombres armados
Parecían casi no existir a nuestro lado.
Era como si algunos de nosotros
Hubieramos descubierto
Que nada estaba al alcance de nuestras manos.
Nos mirabamos con simpatía,
Y el tren nunca dejaba de correr.
Hasta que un día,
Encontrandonos con las espaldas encorvadas
Y la piel pegada a los huesos
Sentimos el tren detenerse,
Casi se nos salieron los ojos de las orbitas
Cuando vimos los hombres armados
Difuminarse a nuestro alrededor
Bajamos las escaleras de los vagones,
Lo que sigue es imposible explicar
con palabras humanas,
Solo sé que desde lejos
Vi una ciudad poblada de seres felices.
¿cómo explicar la impresión que sentí
Al ver partir tras de mi
La larga hilera de carros
Ahora espantosamente vacíos.
Aun tiemblo de pavor
Al recordar tan calamitosa imagen
Aquellos vagones huyendo tras una colina
Derramando por las ventanillas
Montones de ropas en forma de jirones
Que se arremolinaban en el viento,
Cuanta tristeza me embarga aun
Al recordar aquel abrigo que ante mi cayó
Y que examine respetuosamente
Con mis manos temblorosas de emoción:
Unos billetes,
Unos audifonos deshechos,
Unos papeles firmados
Que aseguraban una supuesta prevision.
No pude no verter una lagrima
Al ver en la pantalla iluminada
De un abandonado celular
Un mensaje
Con una promesa de amor.
Lloré un momento,
A orillas de las líneas férreas,
Con el viento en la cara
Viendo ese tren vacio
Que ya se perdia
Tras las colinas.
Entonces, alguien con las manos
Me hacia gestos a lo lejos,
Aquellos pocos amigos
Que habíamos escapar de toda esa calamidad
Ya marchaban felices invitandome
Hacia aquella ciudad indescriptible.

Manuel.

4 comments:

geral.dine said...

si era yo...

mañana comento lo que tienes escrito ya?

son casi las una y a esta hora no funciono bien


saludos!

geral.dine said...

no se porke aparece 9:26 pm :S en fin

Nico said...

Muchacho
siempre es rico leerte

poco tiempo en mis manos para poder disfrutarlo mas contigo


aqui estoy media ausente
pero estoy.......que es lo importante

saludos

vivinci said...

Tiempo que no entraba!
onde tay!
te traño loco! jajaja

Me encantó el texto, ultimamente he leido cosas maravillosas, de toda indole.....

Nos vemos para decirnos palabras como esas...
besos Niño Libra!

aioz!