Saturday, August 16, 2008




Ciegos

No puedes percibir lo que siento,
no puedo captar lo que sientes.
los sentidos humanos no alcanzan para tales cosas,
vamos como dos seres con los ojos vendados,
caminando por la playa del tiempo.
apenas percibiendo el aroma
o el ruido de las olas que nos mojan los pies
no hay remedio para esta ceguera tuya y mía
¿tal vez nunca podamos ver el mar?
lo que trasciende,
lo que esta más allá de estos cuerpos que nos contienen.

Yo se una forma para que puedas mirar en mi interior,
apenas si, como quien mira por la rendija de una puerta.
Puedo contarte que al darme la vuelta,
en un mundo aparte algo se roba el sol
y es como si una ciudad entera quedara a oscuras
y millones de habitantes corrieran a sus casas
como muertos de frío, y se acurrucasen sin destino alguno.

Es cierto somos ciegos, pero déjame guiarte
la imaginación algo puede hacer.
extiende las manos de tu razocinio
palpa mis palabras, ellas son la puerta de entrada.

Ahora esos mismos habitantes temblorosos,
Están estirando sus manos al cielo,
como queriendo alcanzar el robado sol que se aleja
y que ahora no es más que una estrella difusa.
toma esta imagen, bébela en la copa de mis letras,
veras un momento la forma que tiene tu ausencia.
Acaso sientas un poco mi tristeza.


Yo en cambio puedo sentir lo que sientes,
lo aprendí del lenguaje de los sueños,
y de los antiguos poetas,
caen de mis ojos las vendas,
y puedo ver tu interior de extremo a extremo
como un mundo con un sol radiante
y un cometa apenas visible cruzando el cielo,
a un costado de un sol tan grande,
que opaca con su luz todo otro brillo.
como tantos cometas que de día pasaron
y que nadie vio.

Ese soy yo, así de imperceptible,
quien me opaca de tal forma hasta hacerme invisible,
es aquel a quien por voluntad tu llamas

amor.


Esta bien, pongámonos las vendas,
déjame revelarte antes de irme
mi última imagen,
toma de ella su significado:
es una ciudad de sombríos habitantes
que sin sol van por las calles entumecidos.
de pronto una desconstruccion como un terremoto
caen los edificios, se deshacen los caminos,
y se abren las gruesas nubes y un sol radiante que baja
todo se ha transformado en un prado verde
y todo un mundo de personas desconcertadas,
ya no hay horas, un calor inmenso que deshace las ropas
y también las reglas morales, toda censura escapa
y en un mundo aparte millones de bocas que se juntan.
en alguna parte una niña pequeña
esta hundiendo sus pies en un riachuelo riendo.
¿Sientes el gusto de mi alegoría?
(es un arte de decir las cosas sin decirlas)
esta bien te cuento un secreto,
tu mente acaba de estar en mi alma,
en el instante mágico de un beso.
esta listo,
deshace el ensueño.
no fuimos hechos para estas cosas
ponte la venda.
yo tengo la mía.
Volvamos a ser nuevamente dos ciegos.



Manuel.