Wednesday, August 09, 2006

Espiritu de Mozart





La noche estaba fría, y la soledad me envolvía como un suave abrigo, (como lo suele hacer siempre)
El piano me llamaba y mis manos, querían acariciar sus teclas.
Entonces tome asiento y me hundí en mi universo apartado, que siempre llevo junto a mi. Como un mundo sin mundo, que de pronto encuentra su universo; de tal forma mi alma encontró la via de escape, como un hilillo de agua que encuentra el caudal para fluir; de esa misma forma mi espiritu encontró sosiego, en un sin fin de fantasías y ocurrencias, que brotaban de mi mente, mientras hacía sonar la música en la noche.
De pronto, en un rincón de este mundo apartado, sentado, un niño pequeño me miró, quise ir donde él, pero entonces se acercó. Con sus ropas graciosamente señoriales, el niño me pidió sentarse a mi lado.
Parecía un niño vestido como burgues, pero había una pobreza pura en su mirada.
Lo invité. Y oyó la música mientras me hablaba de un perro que tenía de mascota. Me explicó cuanto le gustaba el pollo asado, contandome seguido de esto, que tenía una espada pequeña.
Yo no paré de tocar nunca. Mientras miraba a lo lejos, al niño pareció llenarsele la mirada una dulce alegría. Una dulzura que manaba de sus palabras parecio perfumar el aire.
La música sonó.
Y algo pareció entristecerle.
Un viento subito sacudió el mundo. Y al niño se le escapó una lágrima de sus ojos.
Me contó de una madre que tenía, y tambien de su hermana. Y el niño lloró más aún abrazandome, me pidió ayuda.
Ayudame...
No supe que responder.
¿Que te causa dolor? - dije
No se.
¿me quieres? - dijo el niño, mirandome a los ojos.
Si - respondi admirado.
Entonces las lágrimas que con tanta facilidad habían brotado, dejaron de fluir.
Su llanto se sosegó junto a la música.
Entonces, de un costado, el niño sacó una espada pequeña.
¿Ves? - me la mostró.
Que bonita es - dije.
El niño se levantó de su puesto. En el mundo atardecía. Lo último que vi, fue su sonrisa a lo lejos.
El niñó desapareció.
Y entonces, terminé de tocar, la sonata K 545 de Mozart.
Y me dormí en mis ensueños.

Manuel.

2 comments:

Belinha said...

Hola, he vuelto. Hace tiempo que no te comentaba nada porque primero estaba de viaje y después andaba medio trabada para escribir.

En todo caso, lindo lo que escribiste. Para variar pues :P Acabo de leer el primer comentario que me dejaste, muy lindo, gracias :). Ando medio aburrida, pero tus cuentos son el mejor pasatiempo. Paso tardes leyendo y tratando de escribir algo yo.

En fin, se nota que me falta alguien con quien hablar desahogándome aquí. Perdona. Ahora termino de molestar.

Que tengas un buen fin de semana largo!

Belinha said...

Jaja, lindo tú. Sería buena idea eso de sacar algunas fotos :) Así me enseñas algo.

Cuando hablo de mis problemas a alguien siempre pienso que molesto, porque generalmente a la gente le gusta hablar de sí mismo y me acostumbré a escuchar, no a desahogarme yo. Pero bueno, gracias por ofrecerte a "leerme" de vez en cuando.

Mi msn? bebela15@hotmail.com

Saludiños!